miércoles, 17 de febrero de 2010

El último ganster

Esperando al lado de la ventana
mis pies tapado por los cadáveres de los contrabandistas
de licores de Chicago
soy el último ganster, al fin seguro
esperando al lado de una ventana a prueba de balas.

Miro hacia la calle y reconozco a
los dos asesinos llegados de St. Louis.
Los he visto envejecer
...las armas oxidándose en sus manos artríticas.

Gasolina y otros poemas. Gregory Corso .

1 comentario:

angola dijo...

Lo conozco. Un final imprevisto. Como debe ser.
Dicen de Corso que es el último beat, pero yo no lo creo. Sus escritos, lejos de estar artríticos, gozan cada día de más vigor. Estoy segura que está rellenito de sorpresas aún por descubrir. Donde vivo no es fácil encontrar sus obras, y en la red sólo encuentro traducciones sin versión original, así es que creo que tengo autor para rato.
Un placer, Mikel.
Abrazos.