viernes, 8 de agosto de 2008

Los Vigilantes






Lo que sigue es un texto sobre corrupción policial, a raiz de la desaparición de 100 kg de droga de dependencias policiales hace unas semanas.

Queremos presentar una iniciativa que es la formación de un colectivo de personas dispuestas a reflexionar y a escribir sobre temas variados, desde una perspectiva libertaria. Nos llamamos "Colectivo Malatextos".
Pregunta: ¿Cuál es en principio la función de la policía? Respuesta: Garantizar la seguridad ciudadana y perseguir la delincuencia. Entonces, ¿por qué en asuntos de proxenetismo, violencia de género o tráfico de drogas aparecen implicados muy a menudo, casi a diario, policías en las portadas de los medios? Es la profesión que mayor proporción de delincuencia parece acoger entre sus filas, si bien debiera ser el oficio que redujera ese porcentaje entre todos los gremios, incluidos callistas y podólogos.

Conocíamos hace poco la noticia de la ?misteriosa? desaparición de 100 kilos de coca y caballo en las dependencias policiales de Sevilla. Cabe recordar que aquí, en una comisaría navarra, hace algún tiempo también se es-fumó un buen mogote de hachís. Con esta suplantación del mercado tiemblan los capos ibéricos de la droga y sólo les cabe explorar otras parcelas más triviales como el tráfico de minimotos o megáfonos sanfermineros.

Parece chufla, pero es serio. La delincuencia policial pasa a ser a gran escala. Sin embargo, la sensación general de tranquilidad y complacencia expresada en alabanzas de nuestra clase dirigente a las abnegadas fuerzas del orden, la confianza social en nuestros muchachos es total. Y da miedo. En la capital hispalense, el pasado 11 de Julio fue hallado por apuñalamiento el cuerpo inerte de Rosa Pazos, socio-activista que protestaba a diario contra ?la mafia policial?. Rosa sevillana, ¿qué villano te caló con el jifero? No se trata de emitir juicios de valor, pero este asunto huele a chotuno. Nuestro modelo policial necesita un debate abierto y serio. Igual que las drogas.

La plutocracia, representada por banqueros y constructores que se benefician, sí, del blanqueo del narcotráfico, así como la clase política a la que subvencionan en su patética disputa por el voto, a ellos, les interesa que la droga sea ilegal, ya que su condición de artículo prohibido le transfiere una plusvalía harto cuantiosa para sus buchacas. Ellos, quienes se oponen a la legalización (nuestros medios de subordinación y control), son el opio del pueblo. Y el que se pica ajos come. Un chute o un tripi, lo que sea para engordar sus arcas.

Viva la libertad individual. Los zetaprogres hablan ahora de eutanasia. ¿No es comparable la libertad de elegir entre la vida y la muerte con la de consumir o no? Una prohibición mueve dinero y la otra no, así de simple. Queremos ser a-narcos, libres para elegir consumir o no, siendo la segunda opción, con toda seguridad, la que escogería la gran mayoría, incluidos callistas y podólogos.
Colectivo Malatextos
malatextos@gmail.com

otra noticia de vigilantes:

MADRID.- Las Policías Locales de la región tendrán una unidad de asuntos internos para atajar los posibles casos de corrupción. La Comunidad llevaba tiempo decidida a crear esta Policía dentro de la Policía, pero la operación contra la presunta mafia de Coslada ha precipitado su origen.

Desde la Consejería de Interior llevan meses preparando la nueva Ley de Coordinación de Policía Local, en la que aparecerá esta nueva figura de asuntos internos.

Hasta ahora, la gran mayoría de los cuerpos municipales de la región no contaban con esta unidad. De hecho, sólo los agentes del Ayuntamiento de Madrid tienen este organismo de autocontrol. A raíz de la operación Bloque, que la UDYCO de Madrid realizó hace tres meses y en la que se detuvo a más de 20 agentes de Coslada, se comprobó que la necesidad de controlar a los funcionarios no podía dejarse de lado más tiempo.

Ayer, Francisco Granados, titular de la Consejería de Interior, habló sobre la creación de esta unidad, que será una sola para todas las Policías Locales y que, según la Comunidad, cuenta con el apoyo de los sindicatos y los propios funcionarios. Granados dijo que esta decisión "no se debe sólo al caso de Coslada, pero ha servido para impulsar aún más su creación".

La Comunidad será el órgano encargado de gestionar esta unidad. El consejero afirmó que para ellos "es más positivo que sea un órgano homogéneo a que cada Ayuntamiento tenga una unidad propia".

Para los agentes encargados de participar en esa unidad puede ser uno de los trabajos más desagradables, porque los detenidos van a ser siempre compañeros suyos, a los que habrán tenido que pinchar teléfonos, investigar ante el juez, etc.

La Ley de Coordinación de Policías Locales estará lista después del verano, al menos por parte del Gobierno regional. Después tardará en ponerse en marcha, pero Granados espera que en otoño o a finales de año pueda estar aprobada, según comentó ayer.

A raíz de la operación Bloque, la Jefatura Superior de Policía de Madrid estudió posibles conexiones entre otras policías locales y la de Coslada. Con la nueva unidad de asuntos internos se podrán investigar posibles tramas que afecten a varios municipios.

Para crear esta unidad y los otros dos puntos fuertes de la nueva ley, que son mancomunar a los agentes y crear una buena base de datos, Granados mencionó que cuentan con la experiencia de Enrique Barón, el ex jefe superior de Policía de Madrid, que ha sido el último fichaje de la Comunidad.

Sus tareas como director general de Seguridad consistirán en crear una buena base de datos, semejante a la que comparten Policía Nacional y Guardia Civil, donde las policías de todos los municipios de la región podrán acceder a los mismos datos de sospechosos, así como tener un sistema de comunicaciones compartido, comentó Granados.
Mancomunados

Además, explicó que Barón contribuirá a la parte de la nueva ley que quiere mancomunar a los agentes. Con este cambio, los policías podrán salir de su demarcación para investigar o realizar persecuciones, por ejemplo. Así no tendrán la limitación territorial de su municipio. Al final, la idea conduce a que todos los cuerpos policiales puedan funcionar como uno solo para ser más efectivos.

Ayer, por otra parte, el consejero, junto a Barón y la alcaldesa de Pinto, Miriam Rabaneda, presentaron 10 nuevos coches y seis agentes con los que han dotado a las Bescam de ese municipio.
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