El recién nombrado obispo de Donostia, José Ignacio Munilla, ha asegurado que "existen males mayores" que el que está sufriendo el pueblo de Haití, tras el potente terremoto que asoló Puerto Príncipe hace dos días. Para Munilla, mucho peor que las muertes, el dolor y el caos instalado en la isla caribeña, donde los muertos superan ya los 50.000, y son miles los heridos y damnificados , es "nuestra pobre situación espiritual y nuestra concepción materialista de la vida". Son dos defectos que caracterizan a nuestra sociedad, en opinión del obispo del nacional catolicismo español en el 'frente del norte', y por los que "deberíamos llorar".
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