La vida no cabe entenderla como conciencia de existencia, sino como voluntad. La vida es voluntad de poder. Ser es una generalización del concepto de vivir. Ser es querer, llegar a, convertirse en..., que son múltiples manifestaciones de la voluntad de poder. Donde hay vida hay voluntad de poder. El hombre "es una cuerda tendida entre la bestia y el superhombre. Una cuerda tendida en el abismo...Lo más grande del hombre es que es un puente y no una meta; lo que debemos amar en él es que constituye un tránsito y un ocaso".
Así, sobre las ruinas del hombre viejo y decadente, ha de nacer el superhombre, cuya característica más esencial será la de estar en posesión de la voluntad de poder, que se manifiesta en una conducta activa, creadora y espontánea, frente al comportamiento reactivo e impotente del hombre débil.
"A todos y a ninguno"
de Así habló Zarathustra. Friedrich Wilhelm Nietzsche.
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